Los Socialistas y Demócratas del Parlamento Europeo están presionando por una fiscalidad justa de los gigantes digitales y un tipo impositivo mínimo efectivo que sea ambicioso, antes de una reunión crucial del G20*, en junio de este año. Durante muchos años, el Grupo S&D ha liderado el impulso en el Parlamento Europeo por un tipo impositivo mínimo efectivo y ahora ha conseguido, por primera vez, incluir su petición en un informe parlamentario que ha sido apoyado por una mayoría multipartidista.
Niels Fuglsang, eurodiputado del Grupo S&D responsable de fiscalidad digital, afirmó:
“Nuestro sistema fiscal está roto y debemos repararlo. Los gigantes digitales, con los modelos de negocio más lucrativos, tienen en la actualidad un tipo impositivo efectivo medio del 9,5%, en comparación con el 23,5% que pagan las empresas tradicionales. Cuando la digitalización está dándole la vuelta a nuestras sociedades, el tema de la fiscalidad digital es fundamental para nuestro futuro. Por dar solo un ejemplo: las empresas de plataformas como Uber tienen beneficios enormes, prácticamente no pagan impuestos, externalizando el riesgo empresarial a los conductores y las conductoras y los costes de impuestos, baja por enfermedad o paro a la sociedad. Es sencillamente injusto y podemos cambiarlo trayendo nuestra normativa digital a la era digital. Los gigantes tecnológicos deben pagar impuestos en base a sus beneficios en cada país, independiente de su presencia física. En una economía digitalizada, garantizar que los beneficios sean debidamente fiscalizados es fundamental en un momento en el que nos preocupa que fiscalizar la facturación presente el riesgo de que los costes simplemente se transfieran a impuestos de venta y, por lo tanto, se deriven a los clientes. Las empresas meramente digitales tienden a tener márgenes más amplios y menos costes. Les ha ido especialmente bien durante la pandemia y un impuesto digital es una forma justa de que contribuyan al Plan de Recuperación.
“Por primera vez, una mayoría multipartidista del Parlamento Europeo apoya nuestra petición de un tipo impositivo mínimo y efectivo de carácter global. Les pedimos a los líderes y las lideresas de la Unión Europea que escuchen nuestra petición de justicia fiscal”.
Aurore Lalucq, eurodiputada del Grupo S&D y portavoz de Asuntos Fiscales, afirmó:
“El apoyo del presidente estadounidense Biden a un tipo impositivo mínimo efectivo del 21% es un paso enorme hacia el logro de normas internacionales justas. Durante muchos años, los Socialistas y Demócratas han defendido un tipo impositivo mínimo efectivo que capacite finalmente a los países a la hora de imponer una fiscalidad justa, sin miedo a ser minados por los demás. Nuestra propuesta trata de recuperar el control en una economía global en la cual unas cuantas grandes empresas, seducidas por paraísos fiscales, se salen con la suya retorciendo las normas y enriqueciéndose a costa de la mayoría. Como resultado de la evasión fiscal y el traslado de beneficios, las desigualdades están creciendo y la gente está perdiendo la confianza en las democracias. Es momento de actuar”.
Biljana Borzan, eurodiputada del Grupo S&D y vicepresidenta responsable de una economía que sirva a todos y todas, afirmó:
“Les pedimos a los líderes y las lideresas de la Unión Europea que se unan a la propuesta del presidente estadounidense Biden. Con su iniciativa, el presidente ha creado una oportunidad antes de una ronda crucial de negociaciones sobre normas fiscales internacionales. Aprovechemos al máximo esta oportunidad única y demos un paso adelante en nuestra lucha por la justicia fiscal”.
Nota para los redactores:
*Las negociaciones OCDE (Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos) “Un marco jurídico inclusivo sobre el traslado de beneficios y la erosión de la base” se han desglosado en dos partes, los llamados Pilar 1 y Pilar 2. El Pilar 1 pretende redistribuir los derechos de fiscalidad y redefinir los derechos de fiscalidad, mientras que el Pilar 2 pretende crear un tipo impositivo mínimo efectivo. Las negociaciones se han estado desarrollando desde hace casi una década. La propuesta del presidente Biden y su compromiso de participar de nuevo activamente en las negociaciones les han dado un nuevo impulso.
