Contraatacamos. Después de que la Comisión Europea retirara su propuesta previa de una Directiva marco en 2014, y después de ocho años de bloqueo en el Consejo de la Unión Europea, el Parlamento Europeo ha votado y ha aprobado una Resolución en la que pide que finalmente se garantice un marco jurídico a nivel de la Unión Europea para la protección de los suelos, como existe en el caso del aire o el agua.
La ponente de la Resolución y eurodiputada del Grupo S&D, Maria Arena, comentó:
“No podemos esperar más para tener una protección adecuada de nuestros suelos en la Unión Europea, que representan uno de los compartimentos más esenciales de nuestro medio ambiente, facilitando alimentos, agua purificada, biodiversidad y jugando un papel importante en la regulación del clima. Debemos proteger los suelos frente a crecientes amenazas como la erosión, la desertificación y la contaminación, que son principalmente causadas por actividades humanas.
“Con este informe hemos afirmado claramente que ya es hora de que la Comisión Europea y los Estados miembros entiendan que la mejor forma de proteger nuestros suelos es avanzar de medidas nacionales fragmentadas a un enfoque europeo que sea coherente y esté armonizado.
“La protección europea de los suelos debe incluir definiciones, criterios y objetivos comunes con la finalidad de garantizar que el suelo se utiliza de manera sostenible: la descontaminación del suelo, la limitación del sellado del suelo y la restauración de los suelos degradados son claves para la biodiversidad y la regulación del clima. Finalmente, y no por ello menos importante, debemos asegurarnos de que la Unión Europea no contribuye a la degradación del suelo en países terceros”.
La coordinadora del Grupo S&D en la comisión de Medio Ambiente, la eurodiputada Jytte Guteland, añadió:
“La Unión Europea ya no puede permitirse ignorar la sostenibilidad del suelo. Unas medidas nacionales individuales, fragmentadas y descoordinadas no se han ocupado, y no lo harán, de la continua degradación del suelo en Europa.
“El Pacto Verde Europeo ha convertido la protección del suelo en una de sus prioridades ya que, sin una protección efectiva, sencillamente no conseguiremos cumplir nuestros objetivos: el anhelo de cero contaminación, frenar la pérdida de biodiversidad y la neutralidad del clima. No podemos permitirnos dejar fuera de su ámbito un ecosistema que acoge una cuarta parte de nuestra biodiversidad y que es el segundo mayor sumidero de carbono de la tierra.
“La protección del suelo es un tema horizontal. Por lo tanto, debemos incluir su protección en todas nuestras políticas sectoriales. La política agrícola ha fomentado desde hace demasiado tiempo prácticas que no son plenamente respetuosas del equilibrio y los ciclos naturales de nuestros ecosistemas. Si queremos ser serios en la protección de nuestra salud y del medio ambiente, la Unión Europea debe ser coherente y tener un enfoque coordinado en lo que respecta a la gestión de nuestros suelos, nuestra agua, nuestro aire, la biodiversidad y el clima”.
