Los Socialistas y Demócratas apoyarán hoy, en una votación en el Parlamento Europeo, propuestas para reforzar el sistema de control de la exportación de productos, bienes y tecnologías de doble uso que puedan utilizarse tanto con objetivos militares como civiles. Durante años, los Socialistas y Demócratas han presionado para incluir la tecnología de la información y la comunicación, concretamente el software de vigilancia, en un sistema estricto de control de las exportaciones. La propuesta incluye criterios firmes sobre los derechos humanos, una lista de la Unión Europea para controlar los bienes de doble uso que todavía no estén incluidos en los sistemas de control multilaterales, orientaciones para las autoridades sobre la concesión de licencias y para las empresas sobre la diligencia debida, y requisitos exhaustivos de información para las autoridades de los Estados miembros que conceden autorizaciones con objeto de aumentar la transparencia, ampliando, por lo tanto, considerablemente la propuesta inicial de la Comisión Europea. La presión para disponer de criterios más estrictos de control forma parte de una campaña más amplia del Grupo S&D por una política comercial progresista que aspira a que la Unión Europea lidere la carrera hacia la cima en estándares y valores. El Grupo S&D está intentando que se inicien inmediatamente las negociaciones con los Estados miembros para garantizar la adopción de nuevas normas antes de que concluya la legislatura.
Bernd Lange, negociador del Grupo S&D para el control de las exportaciones de bienes de doble uso y presidente de la comisión de Comercio del Parlamento Europeo, afirmó:
“En la Primavera Árabe, los regímenes autocráticos utilizaron indebidamente herramientas cibernéticas y software fabricados en la Unión Europea y tomaron medidas contra periodistas y defensores de los derechos humanos. Algunos fueron incluso encarcelados y sometidos a torturas. Incluyendo la tecnología de la información y la comunicación en un régimen estricto de control de las exportaciones de bienes de doble uso, queremos evitar que casos como éstos vuelvan a repetirse. Situar la dimensión de los derechos humanos en el centro de nuestras normas de control de las exportaciones hará que sean incluso más ambiciosas que otros sistemas internacionales comparables. Les pedimos a los Estados miembros que sigan nuestro liderazgo y dejen de poner las herramientas de ciber vigilancia fabricadas en la Unión Europea en manos de dictadores”.
La portavoz de Comercio del Grupo S&D, la eurodiputada Alessia Mosca, añadió:
“Estamos orgullosos de que los Socialistas y Demócratas hayan estado en primera línea, presionando por normas más estrictas de control de las exportaciones de tecnologías que pueden ser utilizadas por regímenes autoritarios para espiar a sus ciudadanos y ciudadanas. Hemos luchado por más transparencia, disposiciones claras sobre diligencia debida, medidas contra la elusión y condiciones de igualdad entre los países de la Unión Europea. Las nuevas normas impondrán medidas más estrictas para controlar las exportaciones y obligar a las empresas y a los Estados miembros a desvelar qué países están comprando herramientas de ciber vigilancia. Somos serios en relación con los derechos humanos y con que la Unión Europea asuma el papel de liderazgo en la lucha por la democracia y los derechos humanos, y pronto sabremos si los Estados miembros también lo son”.
Nota para los redactores:
El “doble uso” se refiere a una amplia variedad de bienes, incluyendo sustancias químicas, toxinas, láseres, sensores, productos electrónicos y ordenadores. El intento inicial de Regulación del doble por parte de la Unión Europea uso pretendía enfocarse en los productos que podrían utilizarse para la proliferación nuclear. Hasta ahora, la tecnología de ciber vigilancia no estaba incluida en la Regulación. Los Socialistas y Demócratas han hecho campaña para incluir la tecnología de la información y la comunicación en las nuevas normas, después de que hayan surgido nuevos casos en los que regímenes autoritarios han utilizado ciber tecnología para espiar a sus ciudadanos, por ejemplo, rastreando sus teléfonos móviles o el uso que hacen de internet.
La votación en el plenario del Parlamento Europeo se verá seguida de negociaciones con los Estados miembros, que todavía tienen que acordar su posición. Un mandato firme reforzará al equipo negociador del Parlamento Europeo frente a algunos Estados miembros que están presionando para debilitar las normas con objeto de proteger los intereses exportadores de sus industrias.
