El Grupo S&D del Parlamento Europeo insiste en tratar a las personas con dignidad cuando llegan a Europa buscando asilo, y les pide a las autoridades griegas y europeas que muestren un liderazgo humano para poner remedio a las condiciones desesperadas y lamentables de los solicitantes de asilo que están atrapados en las islas griegas.
Más de 12.500 personas viven todavía en tiendas y contenedores, que no son adecuados para el invierno, en distintos lugares de las islas griegas, la mayoría de ellos en Moria, en la isla de Lesbos. Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D piden que se tomen medidas para poner fin a las condiciones insalubres y antihigiénicas causadas por el hacinamiento y que se adopten medidas para evitar la violencia física que afrontan quienes buscan asilo.
El Grupo S&D ha pedido consistentemente que se reformen las normas europeas sobre el asilo. Los Estados miembros han sido, hasta el momento, incapaces de ponerse de acuerdo sobre la creación de un Sistema Europeo Común de Asilo que sea sostenible, unificado y efectivo, por el que los Socialistas y Demócratas están luchando.
El eurodiputado Claude Moraes, vicepresidente del Grupo S&D responsable de democracias resilientes y derechos fundamentales, afirmó:
“La situación en Moria es totalmente inaceptable. La trágica muerte de una mujer en un incendio hace unas semanas fue el tercer suceso mortal que ha tenido lugar en el campamento desde agosto. Son tragedias que pueden prevenirse.
“Sin un mecanismo de reparto de la responsabilidad entre los países de la Unión Europea, los niveles de hacinamiento en los campamentos de refugiados han llegado a un punto de crisis. Con una falta total de medidas básicas de protección de las mujeres y las niñas y de las personas LGBTI, seguimos presenciando escenas de angustia de personas que son vulnerables a la violencia y el acoso sexual y que tienen demasiado miedo para ir el baño o usar la ducha de las instalaciones. Tenemos la obligación de ofrecer estándares apropiados de vida a quienes solicitan asilo y de proteger tanto su salud física como mental con un sistema de asilo que sea justo y eficiente.
“Al no apoyar un sistema que se base en una solidaridad genuina y un reparto justo de la responsabilidad, los Estados miembros están infringiendo un sufrimiento injusto e innecesario a quienes buscan asilo”.
