La Comisión Europea y el alto representante de la Unión han mostrado hoy su solidaridad en la comunicación común sobre la respuesta global de la Unión Europea al COVID-19, que recoge medidas para abordar la crisis de salud inmediata y las necesidades humanitarias resultantes. 

 

El portavoz de la comisión de Desarrollo del Grupo S&D, Udo Bullmann, afirmó:

“Celebramos la comunicación común sobre la respuesta global de la Unión Europea al COVID -19 que ha presentado la Comisión Europea, que ciertamente va en la dirección correcta.

“En un momento en el que todos los actores globales están decidiendo suprimir o posponer sus contribuciones a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el Grupo S&D apoya firmemente la decisión de la Comisión Europea y los Estados miembros de destinar cerca de 20.000 millones de euros a evitar tanto la propagación del virus como, al mismo tiempo, mitigar su grave impacto socioeconómico.

“La prioridad ahora debe ser abordar la emergencia y las necesidades humanitarias a corto plazo; pero no podemos olvidar nuestros objetivos sociales y económicos comunes a largo plazo, prestando particular atención a los grupos más vulnerables, como los refugiados, los migrantes y las personas internamente desplazadas, así como mujeres, niños y niñas, personas mayores y personas con alguna discapacidad, que ya se encontraban en una situación precaria.

“En este sentido, esperamos que la Comisión Europea también se enfoque en la necesidad de apoyar los sistemas educativos, que están al borde del colapso en varios países. Una educación pública a la que puedan acceder todos y todas es más importante que nunca. Además, es crucial no dejar  a nadie atrás, sirviéndonos de medidas de protección social como la prestación complementaria o facilitando el acceso al crédito, de cara a evitar un colapso social y económico”.

 

El portavoz en la comisión de Asuntos Exteriores del Grupo S&D, Tonino Picula, añadió:

“La Unión Europea es un actor global y como tal, en un espíritu de sincero multilateralismo y de cooperación estrecha con instituciones internacionales claves como las Naciones Unidas y el G20, debemos actuar para ayudar a nuestros socios internacionales –incluyendo a nuestros amigos africanos, en primer lugar– a afrontar esta terrible pandemia global. La crisis del COVID-19 ha golpeado dramáticamente a las sociedades y las economías europeas, causando miles de muertes y poniendo en peligro el futuro crecimiento. La propagación del coronavirus en las áreas y estados más pobres presenta un inmenso riesgo para vidas que ya eran precarias y para la economía de las personas más vulnerables. No podemos permanecer indiferentes ante ello y por eso, pese a los momentos difíciles, apreciamos los esfuerzos que ha dado a conocer hoy la Comisión Europea”.

“El énfasis en el apoyo a los sistemas de salud de los Balcanes Occidentales y la vecindad oriental y del sur, África, Oriente Medio y América Latina es particularmente crucial tanto para los intereses de la Unión Europea como en su fibra moral. También les pedimos a todos los actores internacionales que revisen y evalúen nuevamente todos los obstáculos para luchar efectivamente contra el COVID-19, incluyendo aquellas sanciones extraterritoriales que paralicen la capacidad de los sistemas de salud de los Estados de gestionar la pandemia”.

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