Hoy, el Parlamento Europeo adoptará un nuevo conjunto de normas para dar un paso adelante en la protección de los productos artesanales e industriales tradicionales europeos. El nuevo Reglamento garantizará que productos como el cuchillo de Albacete, el vidrio de Murano o la porcelana de Limoges estén protegidos dentro de la UE y a nivel mundial.
Mientras que los productos agrícolas han estado protegidos por una “indicación geográfica” (IG) de la UE desde hace décadas, los Socialistas y Demócratas llevan tiempo pidiendo una ampliación de esta “indicación geográfica” para conceder también protección a los productos locales no alimentarios. La nueva legislación se aplicará a más de 800 productos, entre ellos la joyería, los productos textiles, el cristal, la porcelana, los instrumentos musicales o los muebles, y permitirá a los consumidores reconocer y confiar en la calidad de los productos.
Los Socialistas y Demócratas han abogado especialmente por que se indique claramente que los productos han sido fabricados en la zona geográfica para la cual han obtenido la IG. Era una cuestión de coherencia con los objetivos de promover las economías, los conocimientos y los puestos de trabajo locales, animar a los consumidores a comprar productos locales “fabricados en la UE” y garantizar que no se les induzca a error. Nuestro Grupo también ha desempeñado un papel fundamental a la hora de asegurar que la protección de las IG también quede clara en la información facilitada en las interfaces en línea, y que las autoridades locales y regionales puedan solicitar una IG en nombre de los productores.
El eurodiputado Ibán García del Blanco, ponente alternativo del Grupo S&D sobre el Reglamento relativo a la protección de las indicaciones geográficas de productos artesanales e industriales, ha declarado:
“Gracias a la inminente votación en el Pleno, productos como la cerámica de Talavera de la Reina —que no es una cuestión menor— por fin estarán en pie de igualdad con las indicaciones geográficas protegidas que existen en el ámbito agrícola, como ‘Champagne’. También se allanará el camino hacia una cierta armonización de las divergentes legislaciones nacionales y se garantizará la protección de los productos artesanales e industriales locales de la UE, también más allá de nuestras fronteras.
Asimismo, queremos combatir la falsificación. A partir de ahora, los consumidores tendrán la garantía de estar adquiriendo un producto auténtico. Por ejemplo, cada vez que compren un cuchillo de Albacete, sabrán que se ha fabricado en esa ciudad con materiales locales y que no es falso.
Gracias a la nueva legislación, el empleo regional podría aumentar en entre un 0,12 y un 0,14% y podrían crearse entre 284 000 y 338 000 nuevos puestos de trabajo en toda la UE*.
Con este nuevo Reglamento, nos proponemos fomentar el dinamismo económico de nuestras regiones, preservar y promover empleos de calidad, así como el saber hacer de los productores locales, y asentar y atraer personas hacia zonas rurales que se enfrentan a tendencias de despoblación”.
*Según datos del estudio titulado “Indicaciones geográficas de los productos no agrícolas” del grupo de reflexión del Parlamento Europeo.
