El Parlamento Europeo ha aprobado hoy la activación del Artículo 7 (1) del Tratado de la Unión Europea contra el Gobierno húngaro. Es la primera vez que el Parlamento Europeo da este paso contra un gobierno nacional. La decisión llega después de un ataque constante y sistémico del primer ministro, Viktor Orbán, contra la prensa, las universidades, el poder judicial, ONGs y otras instituciones independientes.
Una abrumadora mayoría del Parlamento Europeo ha aprobado iniciar los procedimientos del Artículo 7, la cual ha sido considerablemente mayor que los dos tercios que hacían falta. Ello muestra el nivel de apoyo de todo el espectro político a que finalmente se tomen medidas reales contra el Gobierno de Viktor Orbán.
El presidente del Grupo S&D, Udo Bullmann, afirmó:
“El Parlamento Europeo ha mostrado hoy que no tiene miedo a actuar cuando el imperio de ley está amenazado en un Estado miembro. Durante siete años, el Gobierno húngaro de Viktor Orbán ha intentado tomar medidas drásticas contra organizaciones independientes que ofrecen controles y contrapesos a su poder. Hoy hemos dicho que ya basta. No nos quedaremos mirando, viendo cómo Hungría cae en un gobierno autoritario”.
El vicepresidente del Grupo S&D responsable del informe sobre Hungría, el eurodiputado Josef Weidenholzer, afirmó:
“Viktor Orbán, no nos quedaremos a un lado mientras pisoteas los derechos de los húngaros y las húngaras. No toleraremos tu corrupción y tu nepotismo. Cada ciudadano y ciudadana europeo tiene derecho a vivir en una democracia que lo sea, y siempre lucharemos para proteger los medios de comunicación, la separación de poderes y una sociedad civil independiente en Hungría.
“El Consejo Europeo debe actuar ahora. Desde hace demasiado, los gobiernos nacionales han mirado hacia otro lado ante las acciones anti-liberales de Budapest. La votación de hoy las introduce firmemente en su agenda, antes de la reunión de los líderes y lideresas nacionales, la próxima semana, en Salzburgo. Les pedimos que sigan el ejemplo del Parlamento Europeo y muestren que la Unión Europea puede actuar cuando sus valores fundamentales se ven amenazados en un Estado miembro”.
