La comisión de Salud y Medio Ambiente del Parlamento Europeo, que reúne a todos los partidos, ha propuesto medidas para abordar los fallos sistémicos que ha identificado durante el último año la comisión de investigación sobre la medición de las emisiones en el sector del automóvil (EMIS). 

La Comisión Europea ya ha presentado una propuesta de nueva Regulación sobre la aprobación y la supervisión del mercado de los vehículos de motor que está siendo analizada por varias comisiones parlamentarias. Los Socialistas y Demócratas creen que la propuesta todavía es demasiado débil para abordar las deficiencias del sistema actual y hoy han conseguido el apoyo a enmiendas importantes para abordar las deficiencias.  

La portavoz de Salud y Medio Ambiente del Grupo S&D, la eurodiputada Miriam Dalli, dijo: 

“Una de las principales contribuciones para reforzar la supervisión del mercado a nivel de la Unión Europea es la creación de una Agencia de la Unión Europea que esté a cargo de las pruebas y las inspecciones para supervisar la precisión de la implementación de las normas de la Unión Europea. Estamos contentos de haber logrado también bastante apoyo para ofrecer una financiación que sea suficiente y apropiada.  

“Hasta ahora, tanto los fabricantes de vehículos como los Estados miembros han interpretado las normas con demasiada libertad y hemos acabado en una situación en la que no se han aplicado sanciones, lo que significa que no hay control sobre los vehículos que transitan por las carreteras europeas, lo cual empeora la calidad del aire en las ciudades europeas y supone una amenaza cada vez mayor para la salud de los ciudadanos”.  

La comisión de Mercado Interior será responsable de dirigir este informe en el Parlamento y la eurodiputada Christel Schaldemose, que es la portavoz del Grupo S&D para este informe y también es miembro de la comisión, añadió:  

“Presionaremos por los mismos principios cuando votemos en la comisión de Mercado Interior en diciembre. Necesitamos una mejor clarificación de las responsabilidades entre las autoridades nacionales competentes en materia de homologación, los servicios técnicos y los órganos de supervisión del mercado.  

“También necesitamos coherencia en la interpretación de lo que constituye “un dispositivo manipulado” y lo que hace falta en términos de protección del motor de forma que ningún fabricante de vehículos pueda, en la práctica, doblegar o violar las normas de la Unión Europea”. 

Eurodiputados que participan
Jefa de delegación
Coordinadora
Dinamarca