Los Socialistas y Demócratas han recibido hoy con agrado el acuerdo preliminar sobre el paquete bancario alcanzado por el Parlamento Europeo y el Consejo y han subrayado la necesidad de lograr un resultado concreto sobre la reforma del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) y la Unión Monetaria Europea (UME), en la próxima cumbre del euro, en diciembre. El acuerdo aspira a reducir el riesgo en el sector bancario de la Unión Europea, salvaguardar los depósitos del contribuyente y profundizar la Unión Bancaria.
Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D han luchado muchísimo para garantizar que los bancos puedan cubrir sus propias pérdidas y que se ocupen de los riesgos ambientales, sociales y de gobernanza (ASG).
El negociador del Grupo S&D para la BRRD (Directiva sobre Reestructuración y Resolución Bancarias, por sus siglas en inglés) y el MUR (Mecanismo Único de Resolución), Pedro Silva Pereira, afirmó:
“Recibimos con agrado el acuerdo alcanzado en la Directiva sobre Reestructuración y Resolución Bancarias (BRRD2). Es un consenso positivo entre las preocupaciones políticas del Parlamento Europeo y las del Consejo. Estamos convencidos de que contribuirá a la agenda de consolidación de la Unión Bancaria y a la reforma de la Unión Económica y Monetaria (UEM). Está previsto que la Cumbre Europea lo valide la próxima semana. El reparto del riesgo debe ir de la mano de la reducción de riesgos”.
El negociador del Parlamento Europeo para el RRC (Reglamento sobre Requisitos de Capital) y la DRC (Directiva sobre Requisitos de Capital), el eurodiputado del Grupo S&D Peter Simon, afirmó:
“Nosotros, los Socialistas y Demócratas, hemos estado defendiendo, desde hace mucho, que haya más estabilidad financiera y requisitos reguladores claros para los bancos pequeños y de poco riesgo, por igual. Gracias a nuestros esfuerzos, se pondrán en marcha requisitos cautelares y de liquidez para garantizar que los bancos están mejor capitalizados. Además, nos hemos asegurado de que los bancos, y especialmente los que son sistemáticamente importantes, tienen suficientes fondos propios y pasivos admisibles (MREL, por sus siglas en inglés) para cubrir sus propias pérdidas.
“Los bancos estables y resilientes son claves para apoyar un crecimiento que beneficie a todos y todas. También queremos que sean capaces de financiar la economía real, en concreto, a los hogares, las PYMES (pequeñas y medianas empresas) y los proyectos de finanzas sostenibles, con la finalidad de promover el crecimiento económico y la creación de empleo. Con este objetivo, hemos garantizado que, en el futuro, los bancos tengan que evaluar los riesgos ambientales, sociales y de gobernanza (ASG) y tomar medidas apropiadas para abordarlos.
“Con objeto de evitar que se repitan los recientes escándalos fiscales, de los Papeles de Panamá a CumEx, se crearán normas cautelares estrictas sobre el blanqueo de dinero. Las autoridades de supervisión y contra el blanqueo de dinero estarán finalmente obligadas a cooperar estrechamente y a intercambiar información en el futuro. Ello pondrá fin a la vergonzosa situación en la que Estados miembros no se alertan entre sí sobre posibles esfuerzos de blanqueo de dinero y dejan que los autores se marchen sin más”.
El eurodiputado del Grupo S&D Roberto Gualtieri, que es presidente de la comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo, añadió:
“El Parlamento Europeo ha ofrecido una importante contribución al presentar un paquete equilibrado e integral que reduce riesgos en el sector bancario de la Unión Europea y protege los depósitos de los contribuyentes y los ciudadanos, mientras facilita los incentivos necesarios para préstamos que sean buenos para la economía real y para la reducción de los préstamos dudosos (NPLs, por sus siglas en inglés).”
La portavoz de Asuntos Económicos y Monetarios del Grupo S&D, Pervenche Berès, añadió:
“El acuerdo alcanzado marca el final de un proceso largo y difícil para concluir el paquete bancario. Estamos contentos de que el Consejo haya cooperado, hasta el momento, para reducir los riesgos en el sector bancario; pero es imperativo que los Estados miembros muestren la misma voluntad de ofrecer resultados sobre esas medidas de reparto de riesgos que llevan prometiendo años.
“En particular, esperamos que el Consejo llegue a un acuerdo sobre la reforma del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) y dote a la Eurozona de su propia capacidad fiscal.
“Es indispensable llegar a un resultado concreto sobre la UEM, incluyendo el SEGD (Sistema Europeo de Garantía de los Depósitos), para sellar este paquete bancario en el plenario. Que no haya avances es algo que la Unión Europea no puede permitirse más. Una reforma ambiciosa de la Eurozona es más urgente y necesaria que nunca. Se ha terminado el tiempo de las dilaciones y las promesas vacías”.
