Nuestras prioridades y logros 2019-2024

Our priorities and achievements 2019-2024
Protección de los derechos de la ciudadanía
Protest fight woman
Los derechos transfronterizos de las familias deben garantizarse en toda la UE

Ningún menor debería sufrir discriminación por el modo en que ha nacido o el tipo de familia a la que pertenece. En la actualidad, una misma familia puede verse sometida a leyes distintas en distintos Estados miembros para determinar la filiación de un menor. Esto implica que los menores pueden perder a sus progenitores, en términos jurídicos, cuando entran en otro país. Los y las Socialistas y Demócratas luchamos por garantizar que una vez que se ha establecido una relación parental en un país de la UE, esta se reconozca en todos los países de la UE.

Tenemos que proteger la libertad de expresión y de información de los y las periodistas

Estos son elementos fundamentales para el adecuado funcionamiento de nuestras sociedades democráticas y el respeto del Estado de Derecho. Toda persona que realice actos de participación pública, por ejemplo artículos de prensa, investigaciones periodísticas o protestas pacíficas, debe poder hacerlo sin miedo a la intimidación o al acoso. Tenemos que proteger los derechos fundamentales de expresión, información y asociación en toda la UE. Para conseguirlo, hemos de aplicar una directiva que introduzca medidas para proteger a aquellas personas que se expresan sobre cuestiones de interés público, como los y las periodistas.

Los derechos de los trabajadores y trabajadoras tienen que reconocerse en toda la UE

La libre circulación de trabajadores en la UE es una libertad fundamental y un elemento esencial del éxito del mercado interior. La libre circulación de servicios no debe menoscabar los derechos de los trabajadores y trabajadoras ni los derechos sociales. Sin embargo, sigue habiendo empresarios sin escrúpulos, agencias de contratación fraudulentas y dudosos intermediarios del mercado laboral que buscan resquicios legales para explotar a los trabajadores y trabajadoras móviles. A fin de proteger los derechos de más de 1,7 millones de trabajadores/as móviles en la UE, tenemos que reforzar el mandato de la Autoridad Laboral Europea (ALE) para facilitar la aplicación de legislación de la Unión y garantizar una movilidad justa, así como para presionar para que se revise la Directiva sobre las empresas de trabajo temporal a fin de frenar a los intermediarios del mercado laboral y las empresas de trabajo temporal que no cumplen con la legislación de la Unión. Pedimos que se introduzca una tarjeta europea de seguridad social, que la Comisión Europea prometió ya en 2018, como instrumento de ejecución a escala de la Unión para coordinar los sistemas de seguridad social y garantizar la movilidad laboral justa.

Las cualificaciones y los títulos tienen que reconocerse de forma automática en todos los países de la UE

Queremos conseguir una educación inclusiva, accesible, asequible y de calidad para todo el mundo, en cualquier momento de sus vidas. Tenemos que poder movernos libremente en la Unión sin miedo a que nuestra educación, formación o experiencia laboral no queden reconocidas a través de las fronteras de los Estados miembros. Sin embargo, el abandono escolar es todavía una realidad en varios países, carecemos de vías flexibles y modulares de aprendizaje para aprendientes de todas las edades y el reconocimiento de títulos y experiencias de aprendizaje todavía no es automático en Europa. El Espacio Europeo de Educación tiene por objeto subsanar estas deficiencias: necesitamos que sea una realidad para el año 2025. 

Asimismo, las políticas educativas deberían abordar de forma prioritaria las desigualdades sociales agravadas por el confinamiento impuesto por la pandemia de Covid-19, que evitó que muchos niños y niñas de zonas remotas y familias con menos recursos accedieran a una educación de calidad, y arrojó luz sobre el estrés psicológico que sufren algunos jóvenes aprendientes.

Los derechos de voto tienen que ser accesibles en todos los Estados miembros

Hacer que el voto en las elecciones europeas sea más accesible para los ciudadanos y ciudadanas de la Unión no nacionales (los denominados “ciudadanos móviles”) es una prioridad absoluta de cara a aumentar su participación en las elecciones y garantizar el principio de no discriminación, teniendo en cuenta que más de 17 millones de ciudadanos y ciudadanas de la UE residen o trabajan actualmente en el extranjero, según datos de la Comisión Europea.