En respuesta a la decisión adoptada hoy por los Estados miembros de la UE de aprobar un aumento de los aranceles sobre los vehículos eléctricos importados de China del 7,8% al 35,3% (sumado al 10% que ya se aplicaba), los Socialistas y Demócratas piden a China que, junto con la Comisión Europea, trabaje en una solución para garantizar la igualdad de condiciones. China debe velar activamente por que exista una competencia leal.
Para el Grupo S&D, la protección de la calidad de los empleos industriales en Europa y del sector tecnológico europeo ha sido siempre una prioridad. No obstante, los Socialistas y Demócratas destacan la importancia de evitar un recrudecimiento de las relaciones comerciales y están abiertos a dialogar con China sobre la manera de crear una igualdad de condiciones y abordar la competencia desleal en el mercado mundial.
Bernd Lange, eurodiputado del Grupo S&D y presidente de la comisión de Comercio del Parlamento Europeo, ha declarado:
“Todavía no se ha dicho la última palabra. Todavía hay tiempo para encontrar una solución conjunta. Celebro la declaración de la Comisión según la cual está abierta a seguir negociando con China incluso después de la votación. Sería nefasto dejar que las conversaciones se suspendieran y solo habría perdedores si esto sigue agravándose. Ambas partes deben proseguir las negociaciones para encontrar una solución.
“Al mismo tiempo, todo el mundo debería acatar las mismas normas. La exhaustiva investigación basada en hechos de la Comisión Europea ha revelado que no hay competencia leal en el sector de los vehículos eléctricos en China. Ahora corresponde a la parte china formular propuestas sobre cómo subsanar este desequilibrio. Tampoco hay ninguna razón para que China intensifique la situación ya que hemos seguido en todo momento las reglas, a diferencia de otros socios comerciales.
“Queremos unas condiciones justas de competencia para un sector industrial fundamental en la UE, pero no queremos cerrar el mercado. Una solución negociada minimizaría el riesgo de escalada y de contramedidas. La UE no se centra en el proteccionismo, sino en garantizar unas condiciones justas y equitativas que concedan a los consumidores y consumidoras la libertad de elegir el coche que se ajusta mejor a sus necesidades”.
Brando Benifei, eurodiputado del Grupo S&D y coordinador en la comisión de Comercio, ha añadido:
“La decisión de hoy es consecuencia de la investigación en profundidad realizada por la Comisión Europea sobre los fabricantes de automóviles chinos, que confirmó distorsiones de la competencia en el mercado europeo. Es importante destacar que el estudio se llevó a cabo con arreglo a las normas de la OMC y los instrumentos comerciales de la UE.
“Es imprescindible que la UE envíe un mensaje claro a nuestros socios comerciales: no pestañearemos a la hora de defender la igualdad de condiciones en los distintos sectores de nuestra industria. La defensa de la industria europea y de unos empleos industriales de alta calidad en Europa debe ser nuestra prioridad en el ámbito del comercio, y así lo recalcaremos con motivo de la audiencia al comisario designado de Comercio. El sector del automóvil es esencial para Europa, ya que emplea a 13,8 millones de personas y representa el siete por ciento de la producción económica total de la UE.
“Aquí lo que está en juego es la competitividad europea. Como sostuvo Mario Draghi, por razones estratégicas, Europa no desea ser plenamente dependiente de la tecnología extranjera en el sector de las baterías, y deberíamos conservar los conocimientos especializados en Europa. Sin embargo, también deberíamos evitar un proteccionismo total. La industria europea debe asimismo intensificar los esfuerzos encaminados a producir tecnología limpia y coches eléctricos asequibles para las personas”.