Hablando antes del Consejo Europeo de marzo, que estará dominado por el tema del inminente plazo del Brexit, el presidente del Grupo S&D, Udo Bullmann, y el portavoz para el Brexit, Roberto Gualtieri, afirmaron:
“Que el Reino Unido se vaya de la Unión Europea es un error histórico que tendrá enormes ramificaciones para las próximas generaciones. Lo perjudiciales que serán estos efectos dependerá de las decisiones que se tomen la próxima semana. A pesar de todas las frustraciones con el Gobierno del Reino Unido, los líderes y lideresas de la Unión Europea deben seguir enfocados en los efectos a largo plazo del Brexit y no en cálculos políticos a corto plazo. El objetivo de cualquier ampliación que se acuerde es mucho más importante que la duración de esa ampliación.
“Theresa May ha eludido de nuevo sus responsabilidades situando a su partido por delante de su país. Después de que el acuerdo de retirada se rechazara por un margen histórico en enero, le pedimos a la primera ministra que cambiara de rumbo y trabajara con los laboristas para crear una mayoría sólida que apoyara un acuerdo. En cambio, intentó apaciguar a los partidarios del Brexit de su propio partido; una estrategia que acabó en una segunda derrota histórica. Los líderes y lideresas de la Unión Europea no deben permitir que vuelva a suceder.
“Si el Reino Unido necesita más tiempo para resolver el impasse actual, hay que dárselo, pero con condiciones claras. Theresa May debe comprometerse a trabajar con otras partes en un acuerdo que pueda conseguir un amplia mayoría en el Parlamento o dejar que el pueblo británico decida en nuevas elecciones o un nuevo referéndum. Si ello significa que el Reino Unido tiene que participar en las elecciones de la Unión Europea, que así sea. Pese a las complicaciones que conlleva, es un tema menor en comparación con las consecuencias del Reino Unido yéndose de la Unión Europea de forma desordenada.
“Nuestro Grupo siempre ha trabajado para garantizar que, suceda lo que suceda, los derechos de todos los ciudadanos y ciudadanas de la Unión Europea, tanto si viven en el Reino Unido como en otros países de la Unión Europea, estén protegidos y se preserve el proceso de paz de Irlanda del Norte. Los líderes y las lideresas nacionales deben considerar estos principios una prioridad en los próximos días. Los ciudadanos y las ciudadanas no deben pagar el precio del fracaso de los políticos y sus derechos deben estar protegidos en cualquier escenario”.
