Antes del debate y la votación hoy de una pregunta oral acompañada de una Resolución en el Parlamento Europeo reunido en Estrasburgo, el Grupo de los Socialistas y Demócratas ha reiterado su llamamiento a la Comisión Europea para que proponga urgentemente un instrumento sólido que permita prohibir que los productos fabricados con trabajo forzado entren en el mercado de la Unión Europea. Se trata de una petición y una propuesta política clave de los Socialistas y Demócratas en esta legislatura. En septiembre de 2021, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, cedió a las demandas del Grupo S&D y prometió que fueran una realidad. Hoy, los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D le exigen que cumpla su palabra, especialmente ahora que la reciente publicación de los informes policiales de Xinjiang han arrojado nueva luz sobre los abusos contra los derechos humanos entre la minoría uigur y la urgente necesidad de erradicar el trabajo forzado.
Raphael Glucksmann, eurodiputado del Grupo S&D y negociador de la prohibición de los productos fabricados con trabajo forzado, dijo:
“25 millones de personas son obligadas a trabajar en todo el mundo. Queremos prohibir estos productos hechos con sangre y lágrimas en nuestro mercado. Además de las nuevas y contundentes leyes europeas, que obligarán a las empresas a llevar a cabo estrictos controles de diligencia debida en toda su cadena de suministro, le pedimos a la Comisión Europea que proponga un nuevo instrumento sólido que permita prohibir cualquier producto que se haya fabricado con trabajo forzado. Nos aseguraremos de que no haya lagunas jurídicas ni técnicas a través de las cuales las empresas puedan escabullirse. Al facultar a la Unión Europea para bloquear en nuestras fronteras los productos que hayan sido fabricados con trabajo forzoso, podemos conseguir que las empresas se responsabilicen de las condiciones en las que se fabrican sus productos. Las empresas solamente cambiarán su modelo de negocio cuando hagan frente a las consecuencias. Las personas deben anteponerse a los beneficios”.
Bernd Lange, eurodiputado del Grupo S&D, ponente del informe y presidente de la comisión de Comercio Internacional, dijo:
“Abordar el trabajo forzoso es una labor trascendental, pero que debemos afrontar de frente. Una prohibición no podrá abordar por sí sola las causas fundamentales del trabajo forzoso: el reto es demasiado complejo y demasiado grande. La cooperación internacional y la coordinación de diferentes instrumentos son la única manera viable de avanzar, si nos tomamos en serio que se produzca un cambio sobre el terreno. Esto es exactamente lo que los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D están pidiendo hoy; y que la Comisión Europea traduzca con prontitud nuestras demandas en un instrumento de forma que podamos ponernos manos a la obra”.
Nota para los redactores/as:
La Resolución propone que la Unión Europea tenga la capacidad de bloquear en nuestras fronteras los productos fabricados con trabajo forzado.
- Los productos deben ser retenidos por las autoridades públicas cuando existan pruebas suficientes de que se ha utilizado trabajo forzoso para producir o transportar las mercancías. Las autoridades públicas pueden actuar en base a información que haya sido facilitada por las partes interesadas, ONGs, los trabajadores y las trabajadoras afectadas o comunicaciones anónimas.
- La mercancía se liberaría si (a) la empresa puede demostrar que no se utilizó trabajo forzoso, o (b) si las empresas responsables proporcionan una reparación a los trabajadores y las trabajadoras afectados, y el trabajo forzoso deja de producirse sobre el terreno.
- Las autoridades públicas pueden solicitar a las empresas que revelen información pertinente sobre sus cadenas de suministro.
- Debe crearse un sistema de coordinación a nivel de la Unión Europea para apoyar a las autoridades aduaneras.
- Este nuevo instrumento comercial debe ser coherente con la futura Directiva de diligencia debida y con la revisión del plan de acción sobre los capítulos de Comercio y Desarrollo Sostenible (TSD, por sus siglas en inglés).
