Estamos entrando en una nueva fase de la pandemia de la Covid-19 en la cual hay menos presión sobre nuestros sistemas sanitarios. No obstante, la Comisión Europea ha subrayado que debemos permanecer vigilantes y estar preparados ante posibles nuevas variantes en su reciente Comunicación sobre el mantenimiento de la preparación de la Unión Europea y la respuesta a la Covid-19.
La nueva comisión especial del Parlamento Europeo sobre la Covid-19, que se centra no sólo en las cuestiones sanitarias, sino también en las implicaciones socioeconómicas de la pandemia, así como en su impacto sobre la democracia y la solidaridad internacional, aborda varios aspectos que preocupan y se han detectado en la Comunicación de la Comisión Europea.
Kathleen Van Brempt, eurodiputada del Grupo S&D y presidenta de la nueva comisión especial del Parlamento Europeo sobre la Covid-19, dijo:
“Al entrar en una nueva fase de la pandemia de la Covid-19, debemos mantener un debate honesto en relación con todas las decisiones buenas y malas que se han tomado en los últimos dos años, y sacar las conclusiones correctas, a fin de garantizar que Europa esté bien preparada para esta clase de crisis en el futuro.
“Al hablar de la capacidad de recuperación de los sistemas sanitarios, debemos ampliar el alcance de cara a abarcar no sólo el aspecto de la seguridad sanitaria, sino también el refuerzo del funcionamiento general de nuestros sistemas sanitarios, incluyendo la atención a la salud mental. Ahora tenemos que hacer frente a los efectos a largo plazo de la pandemia, como el aplazamiento de los tratamientos contra el cáncer, la Covid de larga duración y el agotamiento.
“Es fundamental abordar cómo la Unión Europea debe defender el interés público. La transparencia, la fijación de precios y los monopolios farmacéuticos deben situarse ahora en el centro del debate europeo. El entusiasmo por la compra conjunta de la Unión Europea desaparecerá si no resolvemos estas cuestiones, lo cual nos complicará la vida en la siguiente fase de la pandemia.
“También está relacionado con la solidaridad global. Será importante garantizar que los países de ingresos bajos o medios también puedan producir vacunas y terapias. La Unión Europea ha desempeñado un papel dudoso en este sentido. La reciente propuesta de exención de los derechos de propiedad intelectual fue “demasiado poco” y llegó “demasiado tarde””.
