Turquía puede emerger más fuerte si defiende el pluralismo y la justicia

Los Socialistas y Demócratas del Parlamento Europeo han expresado sus graves preocupaciones por el nivel actual de democracia en Turquía, hoy, en un debate en la sesión plenaria del Parlamento. El Grupo S&D le ha pedido al gobierno turco que respete plenamente los derechos fundamentales y el imperio de la ley, después del inaceptable golpe militar, y ha subrayado que es necesario que las autoridades turcas garanticen a todos los ciudadanos involucrados el acceso a abogados y a un juicio justo.

El eurodiputado del Grupo S&D y vicepresidente responsable de Asuntos Exteriores, Knut Fleckenstein, dijo:

“Turquía es, y seguirá siendo, uno de nuestros socios más importantes, como miembro de la OTAN y como candidato al ingreso en la Unión Europea. Pero me siguen preocupando mucho los acontecimientos que están teniendo lugar en la actualidad en Turquía, como la suspensión y la detención de numerosos académicos y periodistas, y la reciente retirada de 28 alcaldes electos. Es más importante que nunca que sigamos manteniendo el diálogo en marcha con el gobierno turco para ayudar a estabilizar la situación política y democrática”.

El eurodiputado del Grupo S&D y vicepresidente de Asuntos Exteriores, Victor Boştinaru, dijo:

“Turquía tomó el camino hacia la democracia y el secularismo hace muchas décadas y ha reforzado su posición como un actor creíble en la escena internacional. Sin embargo, las recientes medidas que ha tomado Turquía parecen debilitar estos compromisos. Desde el intento de golpe de Estado, el gobierno de Turquía ha supervisado una purga enorme. Le pedimos a Turquía que respete el derecho a la justicia y a un juicio justo de todos sus ciudadanos y de todos los extranjeros que vivan en Turquía. 

“Ayer, de nuevo, condenamos otro despreciable ataque terrorista en la región de Van. La cooperación entre Turquía y la Unión Europea en la lucha contra el terrorismo debe ser una prioridad para ambas partes. 

“También le pedimos a Turquía que juegue un papel constructivo y responsable de cara a buscar una solución política para Siria, en la lucha contra el llamado Estado Islámico y la gestión del flujo de refugiados sirios”.

La eurodiputada del Grupo S&D y ponente del Parlamento Europeo para Turquía, Kati Piri, afirmó:

“Es comprensible que después del golpe de Estado fallido se hayan tomado una serie de medias, pero la situación actual nos preocupa mucho. 

“Es difícil de entender qué relación existe entre periodistas respetados como Aslı Erdoğan y los conspiradores del golpe de Estado. Es difícil comprender qué relación tiene con los actos del 15 de julio el nombrar administradores fiduciarios de los municipios y retirar a alcaldes que han sido directamente elegidos.

“Turquía puede estar orgulloso de que sus ciudadanos salieran masivamente a las calles a defender su democracia aquella noche. Es un orgullo que todas las fuerzas políticas se unieran para rechazar cualquier derrocamiento ilegal de las instituciones democráticas.

“Turquía tiene la oportunidad de salir reforzado de esta situación: 

- abrazando la pluralidad de medios de comunicación; los medios de comunicación libres desempeñaron un papel crucial aquella noche informando a los ciudadanos; 
- trabajando juntos con todas las fuerzas políticas en reformas constitucionales que hacen mucha falta;
- y demostrando que el imperio de la ley es el principio guía, llevando a los autores ante la justicia”.

El coordinador de Asuntos Exteriores del Grupo S&D, Richard Howitt, añadió:

“La retirada de alcaldes electos del partido kurdo HDP (Partido de la Democracia de los Pueblos) es un tipo de diferente de golpe de Estado, y es una repetición de las medidas que se tomaron en el golpe de Estado real de 1980. Europa debe mantenerse decidida en cuanto a la enmienda de la legislación antiterrorista de Turquía, si queremos avanzar en la liberalización de visados; es una legislación que las Naciones Unidas rechazan a causa del proceso y porque se enfoca en los defensores de los derechos humanos. Finalmente, un golpe de Estado es el ataque máximo a la democracia y los democratacristianos deben dejar de oponerse a abrir los capítulos negociadores 23 y 24 sobre la democracia. Si no lo ven ahora, francamente no lo verán nunca”.