Los investigadores anti-fraude de la UE deben examinar las acusaciones de soborno y corrupción en Kosovo

Hay que plantear urgentemente la posibilidad de que la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF) asuma la investigación de los supuestos sobornos, complicidad para evadir infracciones penales y las amenazas contra periodistas supuestamente realizadas por funcionarios de la Misión de la Unión Europea por el Estado de Derecho (EULEX) en Kosovo, según ha afirmado el eurodiputado Richard Howitt, portavoz de Asuntos Exteriores del Grupo S&D del Parlamento Europeo.
 
“No hacerlo podría desencadenar una investigación parlamentaria sobre las acusaciones”, dijo.
 
El eurodiputado Richard Howitt también cuestionó que aparentemente no se hayan aplicado los procedimientos de protección de los denunciantes, después de que se suspendiera a un funcionario británico que supuestamente había denunciado esas alegaciones.
 
El portavoz del S&D ha realizado estas declaraciones en una entrevista concedida hoy (martes, 4 de noviembre) a la principal emisora de Kosovo, Radio Dukagjini, después de que en una reunión de la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo se le preguntara sobre esas alegaciones a destacados funcionarios de la Unión Europea que se encargan de las misiones de la Política Común de Seguridad y Defensa (PECSD) y del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE).
 
En nombre del Grupo S&D, el eurodiputado Richard Howitt apoyó las propuestas para que la Comisión de Asuntos Exteriores presente más preguntas escritas relativas a la investigación de las alegaciones, dejando abierta la posibilidad de que se lleve a cabo una investigación parlamentaria si la comisión no recibe respuestas inmediatas y satisfactorias.
 
El eurodiputado Richard Howitt dijo:
 
“Tenemos una política de tolerancia cero de la corrupción y el Parlamento Europeo está enviando el mensaje de que cualquier posible actividad delictiva o corrupta relacionada con este asunto debe tratarse con severidad.
 
“Si surgen alegaciones de corrupción, tienen que examinarse completamente de manera equitativa y satisfactoria; y, tal y como están las cosas en la actualidad, no puedo decir con absoluta sinceridad que crea que ya se haya hecho.
 
“La Misión de la Unión Europea por el Estado de Derecho (EULEX) ha hecho mucho y queremos que haga más, no menos; pero su credibilidad y la de Europa están en juego.
 
“El examen que tiene que pasar la Unión Europea no es solo si ha habido un acto de corrupción, sino cómo ocuparse de las alegaciones, que se investiguen adecuadamente y si los responsables, en caso de hallarse evidencias, son procesados y responden por sus actos.
 
“Si hubiera procedimientos judiciales en Kosovo, tendrían que recibir el apoyo de los que estamos en Bruselas.
 
“En este caso, yo y muchos de mis colegas eurodiputados y eurodiputadas creemos que la investigación ha tardado demasiado y que la atención actual que se le está prestando al tema puede deberse solo a que el asunto ha aparecido en los medios de comunicación.
 
“También me preocupa que haya un supuesto denunciante, que es un nacional de mi país, el Reino Unido, y que las normas de protección de los denunciantes, al parecer, no se hayan aplicado correctamente.
 
“Las amenazas a periodistas independientes que hacen su trabajo también son absolutamente contrarias al compromiso de Europa con la libertad de expresión. Si se demuestra que esas amenazas se han producido, los funcionarios responsables no deberán desempeñar ningún cargo en el servicio europeo, a ningún nivel, y deberán ser destituidos.
 
“Hoy he hablado directamente con Federica Mogherini, la alta representante de Asuntos Exteriores, Seguridad y Defensa de la Unión Europea. Sé que le preocupan personalmente estas informaciones y que está dando prioridad política a que se apoye la investigación y a garantizar la plena transparencia de su resultado. Cuenta con el apoyo de mi grupo y creo que es la manera de mantener la confianza del pueblo kosovar, una confianza que todos queremos”.