“La crisis presupuestaria de la UE es insostenible y requiere una acción inmediata”, dicen los eurodiputados y las eurodiputadas del S&D

Los eurodiputados y las eurodiputadas del S&D les han pedido hoy, en Estrasburgo, a los gobiernos de la UE que resuelvan la crisis presupuestaria, que incluye 25.000 millones de euros en facturas sin pagar que se han acumulado desde el 2010.

La socialista francesa Isabelle Thomas, vicepresidenta del Grupo S&D encargada de Presupuesto, dijo:

“Desde hace varios años, el Consejo ha sido un deudor moroso. En un proceso absurdo, los estados miembros han infravalorado la cantidad de facturas, han aplazado pagos y han ignorado los compromisos que han asumido con los ciudadanos a los que representan.

“Esta crisis de pago no es pequeña ni se ha acabado. Es un síntoma de una Europa enferma y de un proceso presupuestario desfasado. A la UE le hace falta tener recursos propios y no depender de estados miembros chantajistas.

“Esta crisis de pago y los resultados de las elecciones europeas demuestran lo importante que es cambiar el rumbo de Europa y su metodología en los próximos cinco años.

“Me satisface que la actual Presidencia italiana haya reconocido que existe un problema cuando las contribuciones nacionales que los estados miembros realizan al presupuesto de la UE se obtienen de sus déficits presupuestarios. Creemos que esto daría más margen de maniobra a los estados miembros para invertir”.

La portavoz de Presupuesto del Grupo S&D, la eurodiputada española Eider Gardiazábal, añadió:

“Detrás de todas esas facturas sin pagar están autoridades locales, pequeñas empresas, negocios que necesitan los pagos y universidades; investigadores que han participado en varios programas europeos y que esperan que se les pague como se les ha prometido.

“Hay estudiantes Erasmus a los que les hace falta el dinero de las becas porque de otra forma tendrán que volver a casa. Hay programas de ayuda humanitaria de ONGs a 400 familias de refugiados que actualmente no tiene dinero ni comida que tendrán que suspenderse.

“La situación es insostenible. Debemos volver a tener una buena gestión presupuestaria. Es una cuestión de credibilidad de la UE. Nuestros socios deben poder confiar en que cumpliremos nuestros compromisos internacionales”.