Hoy, en el Parlamento Europeo, el Grupo S&D ha recibido con agrado la adopción de la resolución sobre la implementación del proceso de Bolonia. Un sector de enseñanza superior de excelencia, gran calidad, que sea coherente y transparente, como un elemento esencial del desarrollo cultural, económico y social, se sitúa en el centro de la agenda de crecimiento del Grupo S&D.
En este contexto, el Grupo S&D ha reafirmado su compromiso con el proceso de Bolonia, que aspira a organizar un sistema europeo de educación superior que sea comprensible, accesible y creíble, con la finalidad de garantizar la compatibilidad y la comparabilidad de los estándares y la calidad educativa de distintos sistemas de educación superior, y apoyar la movilidad y la internacionalización, mientras se respetan la diversidad y la autonomía de países y universidades individuales.
El informe sobre el seguimiento del proceso de Bolonia, elaborado por la eurodiputada del Grupo S&D Krystyna Łybacka, subraya los objetivos del S&D en relación con la cooperación internacional en el ámbito de la educación superior, que incluye, entre otros propósitos, facilitar la movilidad, fomentar la internacionalización y mejorar la empleabilidad, así como aumentar el atractivo mundial y la competitividad del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES).
El informe pide una revisión objetiva y crítica de los avances y los problemas que presenta el proceso de Bolonia, en la conferencia ministerial de mayo del 2015 en Yerevan. El Grupo S&D espera que ese informe sea una señal firme para los ministros de Educación Superior de que deben hacerse más esfuerzos para lograr cumplir los objetivos del proceso de Bolonia y para apoyar a los países que tengan dificultades en relación con su implementación. Al mismo tiempo, el informe destaca que hace falta ocuparse de los nuevos retos que presenta la enseñanza superior europea, como desarrollar una estrategia sobre la dimensión exterior del Espacio Europeo de Educación Superior, ofreciendo amplias oportunidades sobre formas complementarias de aprendizaje y reforzando los vínculos entre la educación superior y la investigación, así como promoviendo la utilización beneficiosa de las innovaciones tecnológicas en la enseñanza y el aprendizaje.
Además, el informe subraya la dimensión social del proceso de Bolonia: abordar el aprendizaje de larga duración, la igualdad de oportunidades en el acceso a la educación, así como la movilidad educativa entre los países participantes para favorecer el aprendizaje intercultural.
Para la ponente Łybacka, la reunión ministerial de Yerevan es muy importante para acometer la revisión de los avances del proceso de Bolonia; pero, en su opinión, el seguimiento que se dé a esa reunión es incluso más importante.
“Necesitamos que los compromisos se transformen en acciones para revitalizar el proceso, volverlo más eficiente y establecer sus objetivos futuros”, afirmó Łybacka.
Implementar las reformas que han acordado conjuntamente los países del Espacio Europeo de Educación Superior, cambiar el enfoque educativo a uno que les resulte más fácil a los estudiantes y que se oriente a la consecución de resultados, y reforzar el reconocimiento de las cualificaciones y los grados es de vital importancia para crear un verdadero Espacio Europeo de Educación Superior.
