Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D han pedido hoy una investigación de las Autoridades Europeas de Supervisión sobre sistemas de arbitraje de dividendos como ‘Cum-Ex’ o ‘cum-cum’ y de su impacto sobre la integridad de los mercados financieros, durante una votación sobre el escándalo CumEx en el plenario. Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D han condenado el fraude fiscal y el robo del dinero de los contribuyentes, y les han pedido a los Estados miembros que lleven ante la justicia a los responsables de este robo masivo, mejorando la legislación fiscal nacional, el intercambio de información y la aplicación de la regulación fiscal y financiera en Europa.

El 18 de octubre, 19 medios europeos sacaron a la luz el escándalo CumEx, que reveló que un grupo organizado de banqueros había robado más de 55.000 millones de euros de las arcas públicas de varios Estados miembros, en los últimos 15 años, con los llamados acuerdos “Cum-Ex”. Se reveló que banqueros, abogados y otros intermediarios estaban negociando acciones y recibiendo reembolsos fiscales por impuestos que nunca se habían pagado.  

Comentando la Resolución sobre el escándalo CumEx, el vicepresidente del Grupo S&D y co-ponente de la comisión especial sobre Fiscalidad, el eurodiputado Jeppe Kofod, el portavoz del Grupo S&D en la comisión especial del Parlamento sobre Fiscalidad, el eurodiputado Peter Simon, y la portavoz de Asuntos Económicos y Monetarios del Grupo S&D, la eurodiputada Pervenche Berès, afirmaron:

“El tiempo de las palabras se ha acabado. ¡Ahora es momento de actuar! Europa no puede permitirse otro escándalo fiscal y otro robo del dinero de los contribuyentes europeos. ¡Necesitamos medidas concretas para luchar contra el fraude fiscal y el blanqueo de dinero ahora!  

“Hoy, los Socialistas y Demócratas han pedido investigaciones nacionales y europeas sobre las instituciones financieras y los intermediarios que han participado en el escándalo CumEx, y una mejor aplicación de la regulación financiera. Los responsables del mayor robo del siglo deben responder por ello.

“Al mismo tiempo, debemos abordar las causas raíz de este robo. La falta de cooperación sincera y efectiva entre las autoridades de los Estados miembros, las limitaciones que han mostrado los sistemas de intercambio de información, normas nacionales divergentes y lagunas jurídicas de la Unión Europea: todas esas razones combinadas permiten el fraude fiscal y el blanqueo de dinero.

El robo fiscal es un delito contra la sociedad que tiene consecuencias perjudiciales para los ciudadanos y las ciudadanas europeos. Se han perdido más de 55.000 millones de euros no solo en las arcas públicas de la Unión Europea, sino también, y lo que es más importante, en nuestros sistemas de bienestar. Europa ya no puede tolerarlo.

“Necesitamos más transparencia, una mejor supervisión de los mercados financieros y medidas coordinadas a nivel de la Unión Europea para evitar que el escándalo CumEX se repita. Con esta finalidad, les pedimos a los Estados miembros que designen Puntos Únicos de Contacto (SPoCs, por sus siglas en inglés) para facilitar una reacción rápida de intercambio de información. Además, hace falta una reforma del régimen fiscal que impida solicitudes ilegales de reembolsos fiscales.  

“Por último, reiteramos nuestra petición de una Unidad de Inteligencia Financiera de la Unión Europea y de un Centro de Coordinación y Coherencia de la Política Fiscal de la Unión Europea. Un mecanismo así garantizaría que, en caso de sospecha de fraude internacional, todos los Estados miembros fueran avisados y que de inmediato comenzara una investigación internacional coordinada”.