El proyecto de informe del Parlamento Europeo en respuesta al escándalo de las filtraciones de Luxemburgo será presentado el próximo lunes, en Estrasburgo, en la comisión especial TAXE (comisión especial sobre resoluciones fiscales y otras medidas de naturaleza o efectos similares) para pedir una acción coordinada de la Unión Europea contra la evasión y la elusión fiscal por parte de las grandes corporaciones.

Antes de la reunión, una de los dos ponentes del Parlamento Europeo, la eurodiputada del S&D, Elisa Ferreira, dijo:
 
“Es una agenda por la cual los Socialistas han estado luchando desde hace mucho. Espero que este informe pueda reunir el apoyo más amplio posible en el Parlamento Europeo para que la lucha contra las prácticas fiscales desleales y perjudiciales se convierta en una prioridad urgente del Consejo.  
 
“Hemos confirmado que la competencia en Europa ya no se produce entre empresas, sino entre Estados miembros que participan en estrategias de “empobrecimiento del vecino”, ofreciendo una variedad de medidas fiscales creativas para atraer a empresas y elevar artificialmente sus propias bases impositivas, privando así a otros países de partes importantes de sus ingresos fiscales debidos.
 
“Esas estrategias crean una distribución desigual de la carga fiscal en detrimento de los sectores más frágiles de la sociedad —los ciudadanos y las pequeñas y medianas empresas— planteando, por lo tanto, serias dudas sobre la justicia y la legitimidad de nuestros sistemas fiscales.
 
“Se está volviendo imposible explicarles a nuestros ciudadanos que los Estados miembros que están presionando por la austeridad en los países más vulnerables son, a menudo, los mismos que contribuyen a la erosión de su base fiscal”.

El portavoz del Grupo S&D en la comisión especial TAXE, Peter Simon, destacó:
 
“Nuestra sospecha se ha confirmado: la evasión fiscal organizada por el Estado no es una excepción, sino prácticamente un modelo empresarial. También parece que los que están al mando no tienen la sensación de que se trate de acciones negativas. Para cambiar sustancialmente esta dinámica, nos hace falta un conjunto global de medidas que ofrezcan, no solo un marco legal más firme contra la planificación fiscal agresiva por parte de las empresas, sino también normas claras de transparencia y sanciones adecuadas por incumplimiento.  
 
“Construyendo sobre las investigaciones actuales de la Comisión de la Unión Europea contra las empresas multinacionales, le pedimos también a la Comisión que presente orientaciones estrictas sobre las ayudas de Estado lo antes posible, afirmando inequívocamente que esas prácticas son ilegales”.

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