Los Socialistas y Demócratas acogen con satisfacción la anunciada Estrategia Europea de Cuidados, que adoptará hoy la Comisión Europea. Con sus dos recomendaciones supone un primer paso hacia el fortalecimiento de los cuidados de larga duración y de los cuidados y la educación en la primera infancia, como se prevé en el pilar europeo de derechos sociales.
El Grupo S&D pide un Acuerdo Europeo sobre Cuidados que sea ambicioso, que esté dotado de instrumentos vinculantes y que tenga una inversión pública apropiada a fin de garantizar a todas las personas que lo necesiten, de la primera infancia a los cuidados que se requieren en la tercera edad y para las personas con discapacidad, un acceso universal, igualitario y efectivo a servicios de cuidados que sean de calidad. También debe promover condiciones laborales dignas y salarios adecuados para todas las cuidadoras y cuidadores, que siguen siendo mayoritariamente mujeres, con el fin de asegurar empleos de calidad que mejoren el atractivo de trabajar en el sector asistencial.
La eurodiputada Heléne Fritzon, que es la vicepresidenta del Grupo S&D responsable de la Igualdad de Género, dijo:
“La pandemia de la Covid fue un triste recordatorio: las mujeres realizan la gran mayoría de las tareas de cuidado, y suelen hacerlo como trabajadoras informales. En la Unión Europea, las mujeres trabajadoras dedican unas 22 horas semanales a trabajo no remunerado; en el caso de los hombres son sólo nueve horas. Incluso en mi país, Suecia, las mujeres realizan al menos un 20% más de trabajo no remunerado que los hombres.
“Si queremos lograr una sociedad que sea justa y donde haya igualdad de género, los cuidados no remunerados e informales y las tareas domésticas deben repartirse mejor entre mujeres y hombres. Debemos garantizar el acceso a guarderías que sean asequibles y de calidad, de forma que todos los padres y madres puedan trabajar, para conseguirlo. También debemos empezar por la educación, mostrando a nuestros hijos e hijas que el cuidado de los demás no es sólo cosa de mujeres. Seguiremos trabajando con la Comisión Europea para garantizar un enfoque de la prestación de cuidados que tenga en cuenta el género, con la finalidad de reconocer los cuidados como un derecho y valorarlos como la columna vertebral de nuestra sociedad”.
El eurodiputado Pedro Marqués, vicepresidente del Grupo S&D y responsable de la Europa Social, dijo:
“Las enfermeras y enfermeros que atienden a nuestros enfermos, los padres y madres que crían a nuestros hijos e hijas, los profesionales que cuidan a nuestros ancianos... su trabajo suele estar infravalorado, mal pagado y desigualmente distribuido. Tenemos que mejorar la situación de todas y todos: de los cuidadores/as remunerados y no remunerados, que son predominantemente mujeres, y de quienes reciben dichos cuidados.
“Debemos revisar los objetivos de Barcelona sobre el cuidado de los niños y las niñas, que se acordaron hace 20 años con la finalidad de mejorar los servicios de cuidado para las niñas y niños, especialmente los menores de tres años, y que sean asequibles. También necesitamos orientaciones firmes de forma que los Estados miembros reformen sus planes asistenciales de larga duración con servicios de calidad a lo largo de toda la vida de las personas. Las dos recomendaciones que se presentarán hoy deben garantizar unas condiciones de trabajo dignas para todos los cuidadores y las cuidadoras, tanto formales como informales.
“Sin embargo, debemos hacer más y más rápido. Para ello, hacen falta inversiones públicas fuertes en cuidados públicos de calidad e instrumentos y leyes vinculantes, no sólo recomendaciones. El sector asistencial tiene un enorme potencial de empleo. Con el cambio demográfico, aumentará la necesidad de trabajo en el ámbito de los cuidados que sea cualificado y esté remunerado. Los robots y otras tecnologías no podrán sustituir a los humanos. Por lo tanto, nos hace falta una Directiva marco sobre cuidados de larga duración, formales e informales, que promueva servicios de asistencia y apoyo de calidad, que sean accesibles y estén integrados, en toda la Unión Europea”.
