A iniciativa de los Socialistas y Demócratas, el Parlamento Europeo adoptó hoy una resolución sobre la situación en la frontera entre los Estados Unidos y México, pidiendo a la Administración de Trump que ponga fin a la separación de las familias de migrantes y que reúna urgentemente a todos los niños que permanecen alejados de sus padres.

Es vergonzoso que los conservadores de los grupos PPE y ECR hayan decidido no apoyar el texto común, cerrando los ojos ante las terribles condiciones de miles de migrantes y solicitantes de asilo, incluidos niños, que se encuentran en instalaciones de inmigración y refugios de los Estados Unidos, sin acceso a derechos básicos como agua, alimentos y medicamentos. Sin embargo, nos sentimos aliviados al ver que conseguimos una mayoría en esta cámara recientemente elegida que cree que los niños nunca deben ser recluidos en centros de detención de migrantes y que nunca deben ser separados de sus familias.

Nacho Sánchez Amor, eurodiputado del SED y negociador de la resolución dijo:

"La práctica de separar las familias que cruzan la frontera de Estados Unidos y de utilizarla como herramienta de disuasión de la migración es simplemente intolerable. Es un doble castigo para los niños y sus familias por el mero hecho de ser migrantes o solicitantes de asilo, porque, además de las consecuencias traumáticas de la separación en sí, tienen que enfrentar condiciones espantosas en centros de detención peligrosamente repletos que no cumplen con los estándares mínimos de derechos humanos. El uso de coerción económica o amenazas de aranceles punitivos con el objetivo de imponer cambios en las políticas de migración en un país vecino es un ejemplo más de las políticas inaceptables presentadas por la Administración de Trump, frente a las cuales la comunidad internacional debe permanecer firme."

La vicepresidenta del Grupo S&D Kati Piri añadió:

“Los Estados Unidos se enfrentan a una crisis migratoria sin precedentes en la que la Administración de Trump está respondiendo con devoluciones forzosas de demandantes de asilo, la detención indefinida de migrantes y la separación traumática de niños y niñas de sus familias. Esta misma semana han comenzado las redadas a gran escala de migrantes indocumentados, criminalizando a los grupos más vulnerables de la sociedad. 

Estas acciones no son solo un ataque contra la dignidad humana. Constituyen una flagrante violación del derecho internacional de los refugiados y de las leyes de los Estados Unidos en materia de refugiados.

Por supuesto, la situación en Europa con respecto al trato a los migrantes no es perfecta. Como Socialistas y Demócratas, nunca perdemos la oportunidad de exigir a nuestros gobiernos que cumplan con los mejores estándares. Pero al mismo tiempo, debemos ser claros: la separación de niños de sus familias por parte de la Administración de Trump es cruel, inhumana y va en contra del derecho internacional. Por lo cual, debe acabar inmediatamente. Como Progresistas de un lado a otro del Atlántico, debemos compartir la responsabilidad colectiva de lograr un camino humano y digno."

 

Nota para los editores:

Según los datos divulgados por la agencia estadounidense de Aduanas y Protección Fronteriza a Amnesty International, entre 2017 y agosto de 2018, aproximadamente 8.000 familias fueron separadas después de cruzar la frontera, y al menos siete niños migrantes murieron el año pasado mientras estaban bajo custodia de la agencia de Aduanas y Protecciones Fronterizas de Estados Unidos. Aunque en junio de 2018 un juez federal en San Diego ordenó a la administración que detuviera la separación, resulta que en realidad nunca se detuvo, y más de 200 niños fueron separados de sus familias después de la decisión.

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