El Grupo S&D del Parlamento Europeo está atónito tras conocerse que algunos de los alcaldes que ganaron las elecciones locales de Turquía, hace dos semanas, están siendo arbitrariamente privados de sus mandatos. Esto se aplica a los alcaldes electos que habían sido expulsados de sus cargos públicos por decretos emitidos por el gobierno después del golpe de Estado de 2016 y que fueron sustituidos por fideicomisarios. Incluso más sorprendente es el hecho de que la Junta Electoral Suprema (YSK, por sus siglas en turco) también haya dicho que se debe dar el mandato a los candidatos que obtuvieron el mayor número de votos tras “los alcaldes expulsados”. Esto va en contra de cualquier norma democrática y es un menosprecio fragante a los resultados electorales.
Kati Piri, eurodiputada del Grupo S&D y ponente del Parlamento Europeo para Turquía, afirmó:
“Parece que los resultados de las elecciones se reconocen solo cuando un candidato tiene conformidad. El partido AK (Partido de la Justicia y el Desarrollo) en el gobierno no solo ha cuestionado el resultado del candidato del opositor CHP (Partido Republicano del Pueblo), que ha conseguido la alcaldía de Estambul, sino que ahora priva de sus mandatos a alcaldes electos del HDP (Partido Democrático de los Pueblos) en la parte suroriental de Turquía, que han sido sustituidos por alcaldes de otro partido, que quedó en segundo lugar. ¿Cómo es posible que el Alto Consejo Electoral (YSK) haya aprobado, en primer lugar, que los candidatos se presentaran y después, cuando han resultado elegidos, sean sustituidos por el candidato de otro partido?
“Esto está muy lejos de lo que entendemos por democracia y respetar los resultados de las elecciones. El Grupo S&D pide que todos los alcaldes electos reciban sus mandatos.
“El mes pasado, el Parlamento adoptó una Resolución que pide la suspensión formal de las negociaciones de adhesión con Turquía debido a la renuncia al imperio de la ley en el país. Nos alegra ver que los primeros resultados tras las elecciones locales muestran que la democracia turca está todavía muy viva y es vibrante, ya que distintos partidos han resultado ganadores en municipios de todo el país. Sin embargo, si las autoridades turcas empiezan a privar arbitrariamente a los alcaldes de sus mandatos, o no reconocen los resultados electorales de los partidos de la oposición, ello tendrá también consecuencias para las futuras relaciones entre la Unión Europea y Turquía”.
