Liderados por los Socialistas y Demócratas, el Parlamento Europeo ha aprobado hoy una Resolución que rechaza la renovación de la licencia del glifosato diez años más, que ha propuesto la Comisión Europea. En cambio, el Parlamento Europeo pide una prohibición inmediata del uso no profesional y de su utilización en parques públicos, jardines y parques infantiles, y un periodo de eliminación progresiva de cinco años para uso agrícola. Después del periodo transitorio de cinco años, ningún producto que contenga glifosato estaría en el mercado de la Unión Europea.

Esta sustancia es, en la actualidad, el herbicida que más se utiliza en el mundo y, según la Organización Mundial de la Salud, es potencialmente cancerígeno y tiene efectos de alteración hormonal. Sin embargo, el glifosato y sus residuos se han detectado en el agua, el suelo, alimentos y bebidas, y en productos no comestibles, así como en orina humana, lo cual representa una amenaza para la salud de los ciudadanos.

Además, la correspondencia interna sin sellar de Monsanto, que se hizo pública en el contexto del litigio en los Estados Unidos y que fue aportada por demandantes que afirman haber desarrollado cáncer como resultado de la exposición al glifosato, ha arrojado dudas sobre la credibilidad de algunos estudios patrocinados por Monsanto. Estos estudios estuvieron entre las pruebas utilizadas por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (AESA) y la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA, por sus siglas en inglés) en su evaluación de la seguridad del glifosato.

 

La portavoz de Salud y Medio Ambiente del Grupo S&D, la eurodiputada Miriam Dalli, afirmó:

“Existe una creciente incomodidad sobre la falta de transparencia del proceso de clasificación de la Unión Europea y muchas preocupaciones en torno a la seguridad del herbicida. Muchos académicos afirman que, debido a su gran genotoxicidad y carcinogenicidad, debe ser retirado inmediatamente del mercado.

“Se ha probado que nuestros ciudadanos y ciudadanas están expuestos al glifosato en alimentos, herbicidas y vida cercana a las áreas fumigadas. El glifosato y sus residuos se han detectado en el agua, el suelo, alimentos y bebidas, así como en el cuerpo humano.

“Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D están muy preocupados por los efectos generalizados del glifosato y queremos que la Comisión Europea se tome este asunto en serio y que aplique el principio de precaución. Con esta Resolución, le estamos diciendo a la Comisión Europea que queremos una eliminación progresiva total del glifosato en los próximos cinco años.

“Queremos que los pesticidas perjudiciales sean sustituidos y queremos darles a los agricultores y las agricultoras tiempo para adaptarse”.

 

El eurodiputado Pavel Poc, portavoz del Grupo S&D para este informe, añadió:

“Hoy hemos ganado una batalla importante para la salud y el medio ambiente y contra los intereses de las multinacionales. Es una decisión histórica que refleja las demandas de los ciudadanos y las ciudadanas y muestra que el Parlamento Europeo es una institución realmente democrática, capaz de lograr un compromiso.

“Hemos conseguido un buen equilibrio con un periodo de eliminación progresiva de cinco años, para que los agricultores de la Unión Europea tengan tiempo de adaptarse antes de la nueva fase de la Política Agrícola Común (PAC), que empieza en 2020”.