Hablando antes del debate en plenario sobre Polonia, los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D han expresado hoy su creciente preocupación por el deterioro de la situación del Estado de derecho y la libertad de prensa en el país. Deben imponerse sanciones si continúan las violaciones flagrantes de la legislación y los valores de la Unión Europea.
El gobierno de Ley y Justicia (PiS) está tratando ahora de adoptar un proyecto de ley conocido como “LEX TVN” para silenciar a la mayor emisora independiente y crítica del país, la TVN. Además, las autoridades polacas han incumplido deliberadamente varias sentencias y fallos del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) y están intentando anular la supremacía de la legislación de la Unión Europea a través de un Tribunal Constitucional ilegítimo que está controlado por el PiS.
El Parlamento Europeo está listo para adoptar el jueves una Resolución, que lleva la fuerte marca del Grupo S&D, en la cual le recuerda al gobierno polaco que la primacía de la normativa de la Unión Europea es una piedra angular de la legislación de la Unión Europea. El texto pide a las autoridades polacas que cumplan de inmediato todas las sentencias del TJUE relacionadas con la independencia del poder judicial. Hasta que ello suceda, la Resolución establece que la Comisión Europea y el Consejo de la Unión Europea no deben aprobar el Plan de Recuperación de Polonia. Los eurodiputados y las eurodiputadas del Grupo S&D también instan a la Comisión Europea a que utilice el nuevo mecanismo de condicionalidad del Estado de derecho, sin más dilación.
El eurodiputado Juan Fernando López Aguilar, presidente del Grupo S&D de la comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior y ponente de la Resolución, dijo:
“Polonia es realmente un caso único. El gobierno del PiS está intensificando la lucha contra la democracia en muchos frentes. Contra periodistas y medios de comunicación, contra jueces y juezas, contra mujeres y minorías. ¡Incluso ahora se han negado a implementar las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea relacionadas con la independencia del poder judicial! Y continúan acosando y procesando a los jueces que intentan aplicar esas sentencias y las normas de la Unión Europea. ¡Nunca había sucedido nada igual en nuestra Unión!
“Por eso, la respuesta de la Unión Europea debe ser mucho más audaz. Tomamos nota de que la Comisión Europea ha empezado recientemente a aplicar iniciativas más severas, incluyendo la imposición de multas. Pero no basta. Los fondos de recuperación deben quedar en suspenso hasta que las autoridades polacas cumplan las decisiones del TJUE. Debe activarse, finalmente, el nuevo Reglamento sobre la condicionalidad del Estado de derecho, y los procedimientos del artículo 7 deben llevarse al siguiente nivel en el Consejo de la Unión Europea, con recomendaciones concretas”.
Katarina Barley, eurodiputada del Grupo S&D y miembro del Grupo de Supervisión de la Democracia, el Estado de Derecho y los Derechos Fundamentales, añadió:
“Hoy es el Día Internacional de la Democracia, lo cual nos recuerda que la democracia no se puede dar por sentada. El pueblo de Polonia lo sabe y toma las calles habitualmente para defenderla, ya sea manifestándose contra la ley de radiodifusión prevista, que restringiría aún más el pluralismo de los medios de comunicación en Polonia, o contra los ataques del gobierno a la independencia del poder judicial y la primacía de la legislación de la Unión Europea.
“Con nuestra Resolución, enviamos una señal de solidaridad a los ciudadanos y las ciudadanas de Polonia que defienden los valores europeos. Pero también presentamos peticiones claras a la Comisión Europea. Como guardiana de los tratados, debe aplicar de forma más coherente las herramientas de las que dispone. Debe haber consecuencias si un gobierno se aleja de los principios de la democracia. Los fondos europeos deben acompañarse de los valores europeos. No se puede incidir en ello lo bastante: el pueblo polaco es en gran parte pro-europeo, es el gobierno del PiS el que se ha opuesto durante años a los valores europeos fundamentales. En lugar de más diálogo, hace falta una acción decisiva por parte de la Comisión Europea”.
