Antes del debate de hoy en el pleno sobre la situación en Venezuela, el Grupo S&D ha expresado su preocupación por los recientes acontecimientos en el país y ha pedido a la UE y a la comunidad internacional que apoyen el diálogo entre el gobierno venezolano y la oposición.

Los Socialistas y Demócratas dieron la bienvenida a la decisión del sistema político venezolano de revertir la sentencia que despojaría a la Asamblea Nacional de sus poderes legislativos, pero permanecen alarmados ante las persistentes tensiones sociales y políticas. El Parlamento Europeo votará una resolución a finales de abril”.

La eurodiputada y vicepresidenta del Grupo S&D, Elena Valenciano, señaló:

“La respuesta internacional ha obligado a dar marcha atrás al intento de limitar la autonomía de la Asamblea Nacional, una señal que permite confiar en la eficacia de la mediación en curso. La UE debe apoyar esos esfuerzos que buscan una solución al conflicto venezolano dentro de la ley. Exigimos que el poder político venezolano se atenga escrupulosamente a su Constitución.

El calendario electoral debe definirse y respetarse. Para salvarla, la democracia debe ser efectiva; la democracia también es necesaria para la recuperación económica.. Hoy en Venezuela existe un desabastecimiento de productos básicos, alimentos básicos y medicamentos. Los líderes políticos deben ser liberados para poder contribuir a la reconciliación y superar la confrontación, mediante el diálogo y de forma pacífica”.

 

El eurodiputado del Grupo S&D Ramón Jáuregui, co-presidente de la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana (Eurolat) ha declarado:

“Los acontecimientos de la semana pasada en Venezuela fueron realmente preocupantes. La retirada de los poderes de la Asamblea Nacional por decisión del Tribunal Supremo fue inconstitucional y contra el Estado de derecho, y la comunidad internacional la denunció por unanimidad como tal. Debemos evaluar positivamente el hecho de que el sistema político venezolano se corrigió a tiempo, pero la tensión social y política fue alta y el riesgo persiste.

El Parlamento Europeo y la comunidad internacional deben seguir apoyando el diálogo entre el Gobierno venezolano y la oposición, como único camino para alcanzar una solución pacífica y democrática en Venezuela”.

 

El eurodiputado del Grupo S&D y portavoz de EuroLat, Francisco ASSIS, añadió:

El 29 de marzo, el Tribunal Supremo de Venezuela retiró sus poderes a la Asamblea Nacional y asumió sus funciones, terminando así con la separación de poderes en el país. Días después, en medio de una enorme presión internacional, el Tribunal Supremo revocó su sentencia, tratando de convencer a los venezolanos de que era sólo una especie de malentendido. La verdad es que el régimen de Chávez nunca aceptó el resultado de las elecciones de diciembre de 2015 y que el régimen manipula al Tribunal Supremo como cree conveniente.

Sin embargo, algo está cambiando. El giro de Nicolás Maduro revela que su estrategia de antagonismo con la oposición ha llegado al límite y que el clima de polarización política en Venezuela ha llegado a tal punto que sólo podrá resolverse a través de elecciones. La UE debe insistir en la liberación de los presos políticos y en la programación de las elecciones regionales que ya deberían haber tenido lugar”.